Desde el pasado el pasado 5 de febrero se ha podido visitar en la Casa de la Cultura Alcalá del Río, la exposición de fotográfica titulada ?Agua, mujer y desarrollo?, organizada por las Delegaciones de Igualdad y Cultura del Ayuntamiento en colaboración con el Área de Cooperación Internacional de la Diputación Provincial de Sevilla.
Desde el pasado el pasado 5 de febrero se ha podido visitar en la Casa de la Cultura Alcalá del Río
, la exposición de fotográfica titulada “Agua, mujer y desarrollo”, organizada por las Delegaciones
de Igualdad y Cultura del Ayuntamiento en colaboración con el
Área de Cooperación Internacional de la Diputación Provincial de Sevilla.
“Agua, Mujer y Desarrollo” es el nombre de una exposición de 20 fotografías que, bajo ese título,
busca llamar a la reflexión a aquellos espectadores que terminen por acercarse a esta cita con la
Cooperación. Se ocupa, concretamente, de localizaciones de África, uno de los países donde la
Diputación de Sevilla realiza cooperación al desarrollo.
Con esta exposición, cuyas fotos han sido realizadas por los propios cooperantes, se pretende que
‘visualicemos’ la situación de las mujeres en África, destacando sus responsabilidades en el
abastecimiento del agua para la familia y para los animales con los que cuentan.
En la exposición también quedan reflejadas imágenes de pueblos de la provincia de Sevilla para
recordar cómo hace 50 años, en nuestras localidades, atravesábamos situaciones muy parecidas a lo
que actualmente ocurre en esas regiones. Ejemplos de cómo utilizaban nuestros mayores los pozos y
fuentes públicas para el abastecimiento de los hogares, el acarreo del agua en animales o el lavado
de la ropa en los lavaderos públicos. Fotos que, en definitiva, están intentando desterrar del
objetivo del fotógrafo a través de acciones de cooperación, mejorando, así, las condiciones de
acceso al recurso agua para que todos dispongamos de ella.
Con una Cooperación eficiente en esta materia, y la experiencia adquirida durante años por la
Diputación de Sevilla en diferentes países, queda demostrado que se puede llevar a estas gentes un
desarrollo social estable, asegurando su alimentación y evitando las hambrunas así como un porvenir
digno e independiente de la solidaridad de otros países y de las inclemencias del tiempo.